martes, 4 de junio de 2013

Litología

¿Qué es eso de litología? ¿Qué nombre tan extraño? Pues la litología es la ciencia que estudia las rocas y sus cualidades. Bueno, está bien, pero después de haber hablado tanto de las rocas, ¿sabemos qué son? Pues son unas masas formadas por minerales, sólidos y compactos. Existen tres tipos de rocas: sedimentarias, ígneas y metamórficas.

Las rocas sedimentarias  se forman por la acumulación de sedimentos. Pero, ¿qué son los sedimentos? Son los pequeños fragmentos de rocas alteradas y erosionadas. Esos sedimentos, después de acumularse, se compactan por el peso de las capas que se van formando sobre ellas. Estas rocas se forman donde los materiales erosionados acaban depositándose. Pensemos un rato en qué lugares pueden generarse estas rocas: en la orilla de un río, en valles, en el mar, en la desembocadura de un río, a los pies de una gran pendiente, etc. Su apariencia en los paisajes es de laderas capeadas.

Las rocas metamórficas se forman a partir de otras rocas cuando éstas tienen que aguantar grandes presiones y temperaturas. Para que entiendas cómo actúan las grandes presiones vas a coger unos cuantos lápices de colores y los vas a tirar de cualquier manera sobre una mesa o el suelo. Ahora vas a colocar en dos extremos opuestos tus manos y vas a ir empujando poco a poco los lápices hacia el centro. ¿Qué es lo que está sucediendo? ¿Qué consigues al aumentar la presión? Los lápices que estaban colocados de una manera se van recolocando quedando finalmente paralelos los unos a los otros. En el caso del metamorfismo ocurre así: la presión hace que los componentes de las rocas tengan que recolocarse para aguantar mejor las altísimas presiones.

Las rocas ígneas se forman cuando se enfría el magma. Pero, ¿qué es el magma? Es roca fundida que se encuentra en el interior de la Tierra., lo sé, la lava también es roca fundida, pero la lava está por encima de la superficie terrestre. Hay dos tipos de rocas ígneas: las plutónicas y las volcánicas. ¿Qué diferencia hay entre ambas? Las plutónicas se forman lentamente y en el interior de la Tierra, mientras que las volcánicas se producen rápidamente, por ejemplo, cuando un volcán entra en erupción. Pero entonces, ¿cómo diferenciamos a simple vista una roca plutónica de una volcánica? Las plutónicas tienen cristales de gran tamaño ya que han tenido más tiempo para generarlos. Los cristales de las rocas volcánicas, sin embargo, son tan diminutos que no podemos distinguirlos. Estas rocas, por tanto, son como una gran masa de formas curiosas y de un único color, normalmente. ¿Recordáis la forma que tenía el carbón dulce? El color, el aspecto poroso… ¿os acordáis? Pues su aspecto se aproxima más al de una roca volcánica (basalto) que al del carbón.



Cualquier tipo de roca puede transformarse en cualquier otra. Incluso, una roca metamórfica, por ejemplo, puede pasar a ser otra metamórfica distinta. Esos procesos de transformación son muy lentos generalmente, durando cientos de miles de años, incluso un millón. Para que te hagas una idea, el ser humano lleva en el planeta entre 3 y 4 millones de años. Es una barbaridad de tiempo el que tardan las rocas en formarse, ¿no crees? Os invito a que observéis las rocas de vuestro entorno detenidamente y que intentéis averiguar la historia que encierran.

Agentes de erosión y paisajes

Piensa en tu paisaje favorito... la playa donde veraneas con tus padres, o el campo que se ve desde la ventana de tu casita del pueblo, o aquel lugar al lado del río donde fuiste de picnic… Puede que parezca que esos paisajes no cambian, pero realmente están en constante evolución. Si te fijas con atención, podrás darte cuenta de esos cambios que van sucediendo a tu alrededor: a veces son cambios muy lentos, como cuando las hormigas crean galerías subterráneas, y, otras veces, esos cambios pueden ser rápidos y muy peligrosos, como cuando llueve mucho y se inundan los campos.

Y, ¿qué provoca esos cambios? Algunos de ellos los provocan fuerzas del interior de la Tierra. En la época en la que vivían los dinosaurios, los continentes estaban unidos, sin embargo, ahora tienen otra colocación. También hay fuerzas externas, como la luz del Sol, el agua, el viento, los animales… que van desgastando y acumulando el material de la Tierra.




Todos esos cambios en la Tierra comienzan por el proceso de meteorización. ¡Qué palabra tan rara! ¿A qué se refiere? Se refiere al cambio de las rocas en el mismo lugar en el que se encuentran. Los cambios pueden ser de dos tipos: físicos o químicos. Para que os hagáis una idea, si tuviéramos una hoja de papel y formáramos una pajarita con ella, o la rompiéramos,  o rasgáramos una parte de ella, este cambio sería físico. El material es el mismo, aunque la forma sea diferente. Si esa misma hoja la quemáramos tendríamos al final ceniza en lugar de papel. Este sería un cambio químico porque el material es completamente distinto.

¿Qué puede producir cambios físicos en una roca? El agua, por ejemplo, puede meterse entre las ranuras de las rocas, presionándola. Cuando esa misma agua se congela la tensión es todavía mayor. Cuando tenemos un pequeño agujero en la ropa, ¿no os han dicho nunca que no metáis el dedo por el hueco? ¿No os han dicho que así ibais a darlo de sí? Algo parecido sucede con las rocas, lo que ocurre es que esos cambios se producen tan lentamente que no podemos darnos cuenta a simple vista.

Los cambios de temperatura también pueden romper o desmenuzar una roca. Parece increíble que simplemente el cambio brusco de frío a calor pueda fragmentar un material tan duro, ¿no? Pero es así. En invierno, cuando hace muchísimo frío y en las lunas de los coches se forma escarcha, no podemos quitar ese hielo con agua caliente porque la luna podría rajarse por el cambio brusco de temperatura. También, cuando cocinamos y vamos a verter en un recipiente de vidrio ingredientes muy calientes, ¿no os habéis fijado como mamá pone una cuchara de metal? ¿Os habéis preguntado alguna vez por qué lo hace? Ese es un truco de cocina para que el recipiente no se raje por el cambio de temperatura ya que el metal conduce mejor el calor que el vidrio.

Existen otras muchas cosas que pueden producir este tipo de cambios, como la acción de organismos vivos. Las plantas pueden fragmentar las rocas gracias a sus potentes raíces. También los animales actúan sobre estos materiales, simplemente, a su paso pueden ir produciendo cambios. Y, el ser humano ¿se os ocurre de qué cantidad de formas pueden fragmentar, romper, agujerear, desmenuzar… una roca? 

Pasemos ahora a ver de qué manera pueden producirse cambios químicos. El agua es muy importante también en este tipo de cambios, ya veréis por qué. Los cambios químicos pueden ser: disolución, hidrólisis, hidratación, oxidación.

¿En qué consiste eso de la disolución? La disolución es una mezcla de dos sustancias donde parece que el resultado final es una única materia, pero no es así. Si tú le echas sal a un vaso de agua y lo remueves bien, al final parece que solo tienes un vaso con un líquido incoloro, pero sigues teniendo agua y sal. ¡Eso es una disolución! Sin embargo, si echamos harina al agua, se formarán grumos, no parecerá una sola materia y, por tanto, eso no es una disolución.

¿Qué significa hidrólisis? Es un tipo de reacción química en la que es necesaria el agua. Los componentes de una sustancia se dividen y se combinan con el agua para formar otro material. Este caso es difícil de entender, pero, para que os hagáis una idea, un ejemplo de hidrólisis es la formación de jabón. Si se mezcla la cantidad adecuada de agua con grasa (animal o vegetal) y con sosa cáustica (que no se debe manejar sin la supervisión de un adulto) obtenemos jabón. De unos materiales pasamos a tener otro, que nada tiene que ver con los primeros y por eso es un cambio químico.

¿Cómo funciona la hidratación de las rocas? Cuando el agua entra en contacto con una roca (por la lluvia, por ejemplo) los minerales que la forman pueden reaccionar. Un caso claro de hidratación es el yeso que se utiliza en construcción. Se toma una roca (anhidrita) y se combina con agua para formar el yeso.

¿Qué es la oxidación? Como ya sabes, en el aire hay oxígeno y, al entrar en contacto ese aire con algunas rocas, puede darse una reacción química y generar un óxido. Si tú dejas tu bicicleta al aire libre durante un tiempo ¿a que le sale una sustancia anaranjada en las piezas de hierro? Eso es óxido. El óxido de otros materiales puede ser de otro color como azul, verde, marrón… 

Los cambios físicos y químicos suelen ocurrir en la naturaleza al mismo tiempo, no actúan por separado. Y, una vez que se ha alterado ese material, es más sencillo que éste se pueda transportar.

¿Qué es entonces la erosión? Es un proceso en el que las rocas cambian, se transportan a otro lugar y, una vez allí, se depositan. Lo normal es que ese “viaje” que va a realizar el material sea hacia lugares de menor altitud, por la gravedad. Además, hay otras cosas que ayudan a la gravedad a desplazar las rocas. Cuando un rebaño de ovejas pasa por una zona, con sus pisadas pueden estar moviendo las piedras del camino. También puede ocurrir que la lluvia impacte contra la tierra removiendo el material. El viento es otro elemento que puede desplazar las rocas. ¿Has estado alguna vez en la playa un día con mucho viento? ¿En ese momento no has tenido que cerrar los ojos para que no te entrara la arena? Hay zonas además, donde la inclinación del terreno favorece ese desplazamiento. Las rocas pueden moverse en estos casos no solo cuando son diminutas, sino que también pueden desplazarse las de gran tamaño, siendo muy peligroso. Por ejemplo: hay tramos de carreteras donde se coloca una especie de red de seguridad en las laderas que las rodean para evitar que caigan rocas en la vía y se produzcan accidentes. 

Un importante agente de erosión es el agua. Ya hemos visto como puede fragmentar una roca de distintas formas. Vamos a ver ahora cómo transporta los materiales. Los ríos van moviendo las rocas lentamente. Si has tenido la oportunidad de estar en una zona del curso superior de un río, te habrás dado cuenta de que las rocas allí son puntiagudas y cortantes. Sin embargo, si has podido estar en la desembocadura, habrás podido comprobar cómo las piedras de ese lugar tienen una forma redondeada y un tacto suave. 



Esa forma y ese tacto se producen cuando el río mueve las rocas y se golpean unas con otras, suavizando sus rasgos. Los valles y los grandes cañones son una forma de relieve que nos indica la erosión que un río ha producido en una zona. Acabamos de ver cómo el río es un gran agente de erosión, pero el agua también puede actuar de otras formas. ¿Alguna vez has ido al parque después de que haya llovido? ¿Te has fijado en el suelo? En el parque no hay un río, pero cuando llueve el agua se abre sus propios caminos con formas serpenteantes. Cuando vamos al parque, no queda agua pero sí ese camino que ha formado, arrastrando la arena y las pequeñas rocas. Además, en la desembocadura de algunos ríos podemos ver cómo el agua deposita y acumula materiales formando lo que conocemos como deltas. El mar, el océano, con ayuda del viento, también erosionan las rocas. Trae a tu mente la imagen de un acantilado. ¿Qué se te ocurre que ha podido pasar para que se formen paredes de roca tan altas y verticales? Pues bien, estos acantilados se han formado por el desgaste de las rocas al chocar las olas contra ellas. ¿Qué es lo que da lugar entonces a las playas? Estas formas de relieve se forman por la acumulación de material fino. Por estos motivos, dos paisajes costeros pueden ser tan distintos.



Otro agente de erosión es el hielo. ¿Y en qué forma el hielo puede producir erosión? En forma de glaciar. Pero, ¿qué es un glaciar? Es una cantidad inmensa de hielo que se puede conservar durante miles de años. Los glaciares se forman en altas latitudes y en montañas elevadas, adaptando su forma a la del terreno. Toman la forma del lugar en el que se generan, igual que cuando con nuestras cubiteras podemos tener cubitos de hielo, corazones, estrellas, etc. Aunque parezca que el glaciar se mantiene quieto, en su sitio, no es así, se desplaza lentamente por la gravedad. En el interior de un glaciar hay otro tipo de materiales que al rozarse con el fondo y los laterales van erosionando el relieve. Cuando cogemos una lima y frotamos sobre un material, lo vamos desgastando y dejando un surco con la forma de la herramienta. Un glaciar actúa lentamente, pero el efecto es el mismo. Cuando el hielo se funde, los materiales que había en su interior se depositan y el terreno sobre el que se había formado el glaciar queda modificado. Las rocas se ven pulidas, rayadas o con estrías. En los lugares donde ha habido glaciares quedan a menudo lagos que nos lo cuentan.



Vamos con otro agente de erosión: el viento. Suele actuar en zonas áridas y en desiertos tórridos, donde el agua y el hielo no están presentes. Por un lado, el viento puede transportar materiales que hace chocar contra unas rocas desgastándolas lentamente, y, por otro lado, transporta rocas diminutas. Cuando deposita los materiales suele ser en forma de dunas.


Por último, tenemos que hablar de los seres vivos. Como ya hemos dicho, las raíces de las plantas pueden llegar a fragmentar las rocas. Los animales también erosionan el terreno con sus pisadas,  o haciendo galerías subterráneas, como es el caso de los topos, lombrices, etc. Aún así, ¿cuál crees tú que es el ser vivo que más erosiona el planeta Tierra? Sin lugar a dudas: el ser humano. ¿Qué cosas hacemos que desgastan la tierra y la modifican? Desde luego con la agricultura cambiamos considerablemente la superficie del terreno. Además, construimos carreteras, túneles bajo tierra, talamos los bosques, creamos minas, construimos ciudades inmensas donde antes era todo natural… No solo erosionamos el paisaje en el que vivimos, sino que nuestros actos, las consecuencias de ellos, sí que se ven en poco tiempo. Tenemos que ser conscientes de eso para no acabar destruyendo por completo nuestro hogar, la Tierra.



Como hemos visto, los agentes de erosión son los que dan lugar al relieve: las montañas, los acantilados, los valles, los campos de dunas, los cañones de los ríos, las playas… Además, están muy relacionados con el clima de cada zona. ¿Dónde creéis que actuará en mayor medida el hielo? Por supuesto en las zonas frías del planeta. ¿Y el viento? Ya hemos visto que actuará en zonas cálidas y desérticas, donde no abundan otros agentes de erosión. Todo está relacionado y aunque lo veamos por partes diferenciadas, forman un todo: el conjunto crea nuestros maravillosos paisajes.


Zonas climáticas y el paisaje

Como ya sabes, hay lugares donde llueve mucho, lugares donde parece que siempre sea verano, lugares donde nunca deja de haber nieve, lugares donde pasamos mucho frío en invierno y mucho calor en verano… Ese es el motivo por el que decimos que existen distintos climas, pero ¿qué es el clima? Si yo te pregunto cómo suele ser la primavera en el lugar donde vives me dirás que no hace ni frío ni calor y que llueve bastante. ¡Eso es el clima! Pero si yo te preguntara que qué tiempo hace hoy, día 4 de junio, me dirás que hace bastante calor y que el cielo está despejado. Cuando hablamos del clima, hablamos de algo general, mientras que el tiempo es momentáneo y cambiante.

El clima depende de cuatro elementos fundamentales: la presión atmosférica, el viento, las precipitaciones y la temperatura.

¿Qué es la presión atmosférica? Es el peso del aire en una zona concreta de nuestro planeta. Depende de la altitud. Al bajar una montaña en coche o teleférico, ¿no has sentido que te pinchaban los oídos? Eso sucede por el cambio de presión. Cuando estás en lo alto de la montaña, tienes menos aire sobre tu cuerpo, la presión es baja. Luego, al descender la montaña, tienes más aire sobre ti mismo y la presión es más alta. Tus oídos sienten esa diferencia y puede que te duelan.

¿Qué es el viento? Es aire en movimiento. Y, ¿por qué se mueve el aire? Imagínate que estás en un lugar donde hay mucha gente y que estáis muy apretados. En cuanto pudieras, irías a un sitio donde haya menos gente y donde puedas tener más espacio y estar más a gusto, ¿verdad? Al aire le pasa lo mismo: se desplaza de las zonas donde hay más presión a las zonas donde hay menos presión y, es esto lo que da lugar al viento.

¿Qué son las precipitaciones? Es la caída del agua sobre la Tierra. Puede ser en forma de lluvia, nieve, granizo, etc.

¿Qué es la temperatura? La cantidad de calor que hay en un lugar. Según la temperatura, podemos diferenciar en la Tierra tres zonas climáticas: una zona cálida, dos zonas templadas y dos zonas frías.

El clima depende a su vez de factores climáticos como la latitud, altitud, localización, relieve, corrientes marinas, etc.

¿Qué significa latitud? Es la distancia que existe entre un lugar cualquiera y el Ecuador. La latitud será más alta en los Pirineos que en el estrecho de Gibraltar. Las tres zonas climáticas de las que hemos hablado, se dividen según su latitud: entre los trópicos se encuentra la zona cálida, de los trópicos a los círculos polares se encuentran las zonas templadas, y en los polos están las zonas frías.

¿Qué es la altitud? La distancia a la que se encuentra una zona respecto al nivel del mar. Cuanto mayor sea la altitud, las temperaturas serán más bajas. Por eso, cuando estamos en la montaña, tenemos más frío que cuando bajamos de ella.

¿Qué quiere decir localización? La localización es la situación en la que se encuentra un lugar. Imagínate que existen dos lugares donde la latitud y la altura son iguales. Uno de esos lugares está en la costa y el otro está en el interior. ¿El clima será igual en los dos sitios? Piensa en la playa. Por la mañana la arena puede estar muy caliente y es posible que no aguantes ese calor, pero el agua está muy fresquita, tanto que a mamá no le apetece darse un baño todavía. Pero cuando vamos a la playa por la tarde, cuando el Sol se está poniendo, la arena ya está fría, mientras que el agua está calentita y a mamá le dan más ganas de meterse a jugar contigo. El mar regula la temperatura porque se calienta y enfría más lentamente que la tierra. Por esta razón, el clima en el interior no es igual que en la costa. La localización es muy importante.

¿Qué significa el relieve? Es el conjunto de formas que presenta la superficie de la Tierra.  Puede haber montañas, llanuras, valles, mesetas (que son llanuras a gran altura), volcanes, islas, penínsulas, etc. Todo esto son formas de relieve.

¿Cómo se forman las corrientes marinas? ¿Por qué en el mar hay olas? Hay olas porque el viento ejerce una fuerza sobre la superficie del mar. Cuando estés en la bañera fíjate en lo siguiente: quédate muy quieto en el agua, sin moverte nada durante un buen rato. Parece que el agua es plana. Si soplaras un poquito sobre el agua ésta empezaría a moverse y podrías ver como se acerca a tu cuerpo en forma de olas diminutas. Eso es lo que ocurre cuando el viento se mueve sobre la superficie del mar y los océanos.


Vamos a hablar ahora de las zonas climáticas de la Tierra.

La zona cálida es el lugar de la Tierra donde más pega el Sol. Por eso hace tanto calor. ¿Te imaginas que viviéramos en un verano que nunca termina?






Paisaje ecuatorial.
¿Dónde crees que puedes encontrar un paisaje de este tipo? Como su nombre indica, en torno al Ecuador. En esta zona llueve muchísimo. Al llover tanto, ¿cómo te imaginas que son los ríos de estos lugares? Son muy caudalosos durante todo el año.




Paisaje tropical.
Estos paisajes los encontramos más al norte o al sur de los ecuatoriales. En estos paisajes se viven dos estaciones muy diferenciadas: una estación húmeda y una estación seca. Al tener estas dos estaciones tan diferentes ¿cómo crees que serán los ríos de estos paisajes? Serán irregulares, produciéndose crecidas e inundaciones en la estación húmeda.







Paisaje desértico.
Se encuentran en torno a los trópicos. Las temperaturas varían considerablemente del día a la noche. Aunque no lo parezca por el calor que hace durante el día, por la noche la temperatura baja muchísimo, por debajo de cero grados. ¿Cómo crees que son las precipitaciones? Muy escasas e irregulares, por tanto, no hay ríos. 



¿A qué se deben esos climas tan distintos en una misma zona climática? Si cogiéramos la zona cálida y la desplegáramos para ver lo que sucede de forma más clara tendríamos lo siguiente:


Esto es lo que sucede: la célula de Hadley es el ciclo que sigue el aire en la zona cálida. Las nubes y, por tanto, la lluvia tienen lugar cuando el aire cálido y húmedo se eleva. A medida que sube, el vapor de agua que contiene el aire se condensa y se forman las nubes o las precipitaciones. El aire ya seco, posteriormente, baja


En la zona templada hay cuatro estaciones muy diferenciadas porque las temperaturas variarán según el período del año en el que estemos. En invierno hará mucho frío, en verano mucho calor y en primavera y otoño estaremos más a gusto. 






Paisaje oceánico.
En este tipo de paisaje las temperaturas son suaves a lo largo de todo el año y las precipitaciones ligeras pero constantes. Por este motivo, los ríos que encontramos en estos paisajes son caudalosos y regulares.








Paisaje mediterráneo.
Se encuentran en zonas costeras donde los veranos son cálidos y secos, y los inviernos suaves. Las precipitaciones son irregulares. En otoño es cuando suele haber precipitaciones más abundantes y torrenciales. 







Paisaje continental.
Son paisajes interiores, donde las temperaturas son extremas (muy bajas en invierno y elevadas en verano) y llueve relativamente poco. Pese a eso, los ríos son caudalosos.









La zona fría es donde pega menos el Sol. Siempre hace mucho frío y apenas nieva, aunque está todo cubierto de hielo y nieve. ¿Cómo crees que sería nuestra vida si viviéramos en un invierno constante?







Paisaje polar.
Se da en los mismos polos, donde la insolación es mínima. Las temperaturas son realmente bajas y, ¿crees que llueve mucho? Las precipitaciones son en forma de nieve y, aunque no lo parezca, nieva muy poco.









Paisaje de alta montaña.
Las temperaturas son muy bajas y las precipitaciones muy abundantes y en forma de nieve.

Para entender mejor por qué en cada zona del planeta tenemos climas tan distintos vamos a desplegar de nuevo una parte de la Tierra, la que corresponde a la zona templada y la zona fría del hemisferio norte:


Como podéis ver, en la zona templada se forman nubes por los frentes de aire. ¿Qué es un frente de aire? Es una zona donde una masa de aire frío y una masa de aire caliente se encuentran. El aire caliente asciende por encima del frío y, cuando llega a una altura bastante elevada, el vapor de agua que transportaba se condensa formando una nube o precipitando en forma de lluvia o nieve. Además, podéis comprobar cómo la zona fría es una zona bastante seca. Al llegar poca luz solar el aire es muy frío, el ambiente es poco húmedo y, por lo tanto, hay muy pocas precipitaciones. Esta zona está llena de desiertos fríos. ¿Puede haber desiertos fríos? Claro que sí, al fin y al cabo los desiertos son zonas secas donde ni llueve ni nieva.

Después de ver todo esto piensa, ¿cómo es el lugar en el que vives? ¿Hace calor todo el año, o hace frío? ¿O quizás, pases frío en invierno y calor en verano? ¿Llueve mucho, o no tanto? Date cuenta de lo que te ofrece tu entorno y disfruta de todo lo bueno del lugar en donde vives. 


Bienvenidos

¡Hola a todos! Este espacio lo quiero dedicar a quienes disfrutáis de verdad de los maravillosos paisajes que nos rodean, pero, en especial, a los niños. Os invito a que vengáis conmigo y aprendamos muchas cosas sobre nuestro gran hogar, el planeta Tierra, mientras viajamos a través de los distintos paisajes que en él podemos encontrar. 

Pensemos un momento en los lugares que hemos tenido la oportunidad de visitar. ¿te acuerdas de aquel verano que fuiste a la playa con tus padres? ¿Y aquella vez que fuiste a la montaña a esquiar? ¿Recuerdas lo bien que lo pasaste con tus amigos en aquella excursión que hicisteis a la montaña? ¡Guau! ¡Quede paisajes distintos podemos traer a nuestra mente! Pero, ¿cómo es posible que en el planeta Tierra haya tantos lugares diferentes? ¡Venga! ¡Vamos a averiguarlo!